Hace un par de días
-aleatorios pero consecutivos-
en que duermo a deshora
a deshonra
y a lo loco.
En que bebo lo que sea
bailo en contaminación.
También pierdo a los dados
empato en la cama
y gano a qué.
Hace un par de días
-de mañanas o de noches-
en que pienso demasiado
no (te) entiendo nunca nada
y escribo bien poco.
En que no tengo ropa limpia,
ni plátanos, ni dramas
(más allá de la mera existencia
humana cruel incomprensible,
por supuesto).
Y estoy hoy
ahora ya
suficientemente cansada como para dormir hasta mañana
y hasta el mañana de mañana.
Pero sobre todo,
estoy hoy
ahora ya
-y va para largo-
suficientemente cansada como para dejar de intentarlo
(y ya no hablo de dormir, corazón).
No hay comentarios:
Publicar un comentario